
En el Día Internacional de la Madre Tierra, es importante destacar la interdependencia entre los seres humanos y la diversidad de especies con las que compartimos nuestro hogar. Sin embargo, nuestros actuales hábitos de producción y consumo ponen en riesgo la sostenibilidad de nuestro planeta. Con una población mundial de 8 mil millones de personas y desafíos como la escasez de agua y la degradación de los suelos, es crucial adoptar nuevas formas de manufactura y consumo para garantizar un futuro sostenible.
Kellogg y su proyecto de Apoyo al Abastecimiento Responsable:
En este contexto, Kellogg es una compañía que está comprometida con la sostenibilidad y busca generar alianzas y proyectos que beneficien al medio ambiente a lo largo de su cadena de valor. Uno de estos proyectos es el Apoyo al Abastecimiento Responsable en México, que se realiza en colaboración con el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) desde hace 6 años. Este proyecto tiene como objetivo promover una relación armoniosa con la naturaleza y establecer un modelo de abastecimiento responsable que equilibre las necesidades económicas, sociales y ambientales.

El rol de la agricultura de conservación:
Una de las principales estrategias de este proyecto es promover la agricultura de conservación. Actualmente, el sector agropecuario es responsable del 24 % de los gases de efecto invernadero y del 70 % de las extracciones de agua de ríos, lagos y acuíferos. Además, el cambio climático está afectando la producción de alimentos, con la reducción de la producción de cereales con cada aumento de temperatura en la Tierra. Es por eso que la agricultura de conservación se presenta como una solución para mitigar estos impactos.
Beneficios de la agricultura de conservación:
La agricultura de conservación consiste en trabajar las tierras agrícolas de forma amigable con la naturaleza, lo que no solo mejora la productividad, sino que también recupera importantes funciones ecosistémicas. Gracias a la implementación de este enfoque en el proyecto de Apoyo al Abastecimiento Responsable, cerca de 400 agricultores han logrado una rentabilidad del 40 % y han producido más de 190 toneladas de maíz amarillo. Además, la calidad del grano permite producir más con menos agua, reduciendo hasta en un 50 % el consumo de este recurso. También se ha logrado un óptimo manejo de agroquímicos, reducción del consumo de combustible en un 54 % en comparación con prácticas convencionales, duplicación de la eficiencia en la aplicación de fertilizantes nitrogenados y una disminución del 23 % en la emisión de CO2 a la atmósfera.

Objetivos futuros y llamado a la acción:
Kellogg tiene como objetivo impactar a un millón de agricultores con estas prácticas sostenibles para el año 2030. Hasta el 2021, ya se había alcanzado a 445,000 agricultores y agrónomos a nivel global.
Kellogg está comprometido con la sostenibilidad y con la implementación de prácticas responsables en su cadena de valor, en colaboración con aliados como CIMMYT. A través del proyecto de Apoyo al Abastecimiento Responsable en México, la compañía ha logrado generar un impacto positivo en la agricultura de conservación, promoviendo una relación armoniosa con la naturaleza, mejorando la productividad de los agricultores, reduciendo el consumo de agua y agroquímicos, disminuyendo la emisión de CO2 y contribuyendo a la regulación del clima y la captura de carbono.